Preguntas bíblicas que los católico romanos no pueden responder

De conversaciones con católicos practicantes y bien preparados, he notado que hay muchas preguntas bíblicas a las que ellos no pueden responder. Muchos de ellos buscan sinceramente una respuesta en diversas fuentes, sin embargo no la encuentran, al menos no encuentran una respuesta que los deje convencidos y satisfechos, ni a ellos mismos. Al no encontrar respuesta, lo que generalmente hacen es responder con otra pregunta o con otro versículo bíblico que aparentemente contradice la pregunta original, buscando con ello dar por cerrado el tema, sin embargo la Biblia no se contradice a sí misma, sobre todo en temas tan relevantes como salvación del hombre. En algunos casos me he encontrado con católicos que al no saber como responder, lo que hacen es empezar a dudar de la veracidad de las escrituras, sin embargo al partir del supuesto de fe de que la Biblia es la palabra de Dios, esa argumentación no es valida. A continuación algunos de los versículos que los católicos buscan evadir y que más de alguno deseara que no formaran parte de la Biblia, dado que su doctrina no tiene ni tendrá una respuesta a ellos.

– Efesios 2:8-9 «Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.»

Este pasaje de la Biblia claramente declara que la salvación viene únicamente a través de la fe. No hay forma en que el ser humano pueda salvarse, pues todos hemos pecado (Ro. 3:23) y la paga del pecado es la muerte (Ro. 6:23). La única forma en que alguien puede entrar al cielo es estando libre de pecados. Solo a través de creer en el sacrificio de Jesús en la cruz los pecados pueden ser perdonados, ya que «sin derramamiento de sangre no se hace remisión» (He 9:22).

Una clásica respuesta de un católico contiene el pasaje de Santiago 2, adonde se dice que «la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma», sin embargo en ese pasaje nunca se dice que se es salvo por obras, sino que se está tratando el tema de que las obras deben ser producto de la fe. Este es un tema difícil de entender para alguien que no ha nacido de nuevo, ya que muchos cuestionan «entonces puedo pecar deliberadamente y me voy a salvar», más no saben que esto no es de esa forma, ya que cuando un cristiano se convierte, el Espíritu Santo llega a morar en la vida del creyente y con ello el cristiano lucha por alejarse del pecado y busca hacer el bien, sin embargo esto no hace que se gane la salvación, pues el precio de la salvación es la sangre de Jesús. Las obras solo son el resultado de la fe.

Por años fui católico y vivia una vida pecaminosa. Asistia a misa todos los domingos, era parte activa de un grupo juvenil salesiano, sin embargo luego de dichas actividades los vicios eran los que reinaban en mi vida. Cuando conocí a Jesús, mi vida cambió por completo y ahora soy libre de vicios y vivo para los demás. Sin embargo mis obras no valen nada, pues solo son un acto de gratitud a Dios.

Romanos 11:6 «Y si por gracia, ya no es por obras; de otra manera la gracia ya no es gracia. Y si por obras, ya no es gracia; de otra manera la obra ya no es obra.»

El apóstol Pablo dejo bien claro que la salvación es solo alcanzada por la gracia de Jesús. Es decir que la salvación es por gracia, más nada y menos nada. Ya que sí fuera por obras «ya no es gracia». La gracia por su definición es un don gratuito dado por Dios y si es gratis entonces no hay que hacer nada más que creer para ganarlo.

Parece tan simple de entender lo que Pablo escribió, sin embargo es muy difícil de comprenderlo para las personas que están atadas a la religión. La religión enseña que para llegar a Dios es necesario hacer obras, sin embargo el mensaje del evangelio es que Dios mismo vino al mundo a morir en una cruz para que todo el que crea en Él sea salvo y tenga vida eterna (Jn. 3:16)

– Juan 14:6 «Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.»

Jesús claramente expreso que Él es el único camino para entrar al cielo. Así de simple, no hay otra forma de llegar al cielo más que el creer en el sacrificio perfecto de Jesús en la cruz del calvario. Sin embargo los católicos consideran que el único camino para entrar al cielo es su iglesia, lo cual sin duda contradice a lo dicho por el Señor Jesús. Con la creencia antibíblica de que es necesario ser parte de la iglesia católica para ser salvo, muchas personas viven atadas al catolicismo. Jesús enseñó de un camino para ser salvo, el cual no es ni una iglesia ni mucho menos una religión, sino que nadie va al Padre sino es por Él.

Por otro lado, también hay muchos católicos que creen que por ejemplo las personas de otras religiones (Ej: budistas, musulmanes, etc.) lograran su entrada al cielo a través de buenas obras, sin embargo Jesús fue bastante claro: «nadie viene al Padre, sino por mí». Es por ello que la iglesia del Señor Jesús debe estar urgida a predicar el evangelio a toda criatura. Por algo ese fue el mensaje que Él dejó antes de partir.

2 Timoteo 2:5 «Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre,»

El único mediador entre nosotros los hombres y Dios es Jesús. Ni la virgen Maria ni ningún santo católico, ni ningún otro es mediador entre nosotros y Dios. El único al que deben ir dirigidas nuestras oraciones es a Jesús, pues al ser Dios mismo, puede escucharnos desde adonde sea que nos comuniquemos con Él. Ni Maria ni los santos católicos  son Dios, por lo tanto no son omnipresentes, lo cual los imposibilita de escuchar los rezos que se les hacen tanto en América, como en Asia o Europa.

Los católicos citan las bodas de Canán como ejemplo de intercesión, pero ¿Como Maria puede escuchar oraciones en todo el mundo si ella no es omnipresente?

En el Antiguo Testamento el pueblo tenia acceso a Dios únicamente a través del Sumo Sacerdote, pero al morir Jesús el velo del templo se rompió, como símbolo de que ahora ya tenemos acceso directo al trono de la gracia, por lo cual el escritor de la carta a los Hebreos nos dice «Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.» (He 4:16). Ya no necesitamos de ningún mediador más que Jesús para poder tener acceso a Dios.

Por años creía en la imagen católica de un Dios enojado, al cual era necesario convencer a través de su madre. Sin embargo, ahora que le conozco se que Dios es el ser más bondadoso y misericordioso que pueda haber.

Espero alguna respuesta bíblica a alguno de los versículos antes citados.